Actualmente, la contaminación ambiental se está convirtiendo en un problema cada vez más grave. La contaminación por metales pesados en el suelo se ha convertido en un problema global. Amenaza seriamente la salud humana y el equilibrio de los ecosistemas. En respuesta a este problema, es necesario buscar activamente métodos efectivos de tratamiento. Bentonita, como mineral de arcilla natural, ha demostrado una capacidad de adsorción única. Ha mostrado un potencial significativo en la remediación de suelos contaminados con metales pesados. Como resultado, bentonita se ha convertido en un material clave en el campo de la protección ambiental.

La grave situación de la contaminación por metales pesados en el suelo
¿Qué tan grave es el problema actual de contaminación por metales pesados en el suelo? Cada año se descargan una gran cantidad de contaminantes metálicos pesados en el medio ambiente. Estos contaminantes provienen de la producción industrial y agrícola, la descarga de residuos domésticos urbanos, la contaminación por tráfico y el riego con aguas residuales. Datos relevantes muestran que aproximadamente 15,000 toneladas de mercurio, 5 millones de toneladas de plomo, 15 millones de toneladas de manganeso y 3.4 millones de toneladas de cobre han causado graves problemas de contaminación del suelo.
Cómo usar bentonita en la remediación de la contaminación por metales pesados en el suelo

Los principales componentes químicos de las bentonitas incluyen dióxido de silicio, óxido de aluminio y agua. También contiene elementos como hierro, magnesio, calcio, sodio y potasio. La bentonita tiene una estructura en capas única. La capa intermedia contiene cationes intercambiables, como iones de calcio y sodio. Esta estructura confiere a las bentonitas una fuerte capacidad de adsorción e intercambio iónico. Además, la bentonita posee buenas propiedades físicas y químicas, como absorción de agua, hinchamiento, adhesión, lubricidad y actividad catalítica.
La capacidad de adsorción de la bentonita en la remediación de suelos contaminados con metales pesados se debe principalmente a su estructura física y química única. Iones de metales pesados como plomo, cadmio y cobre pueden ser reemplazados por cationes entre las capas de la bentonita mediante intercambio iónico. Esto permite que sean firmemente adsorbidos en la bentonita. Además, en la superficie de la bentonita existen numerosos sitios de adsorción física y química. Estos sitios capturan aún más iones de metales pesados y forman compuestos estables.
En aplicaciones prácticas, las bentonitas pueden aplicarse directamente al suelo contaminado. Se mezcla completamente con el suelo mediante agitación o arado. El componente de montmorillonita en la bentonita reacciona con los iones de metales pesados en el suelo. Esta reacción fija los metales pesados y reduce su biodisponibilidad, disminuyendo así la absorción y acumulación de metales pesados por las plantas. Estudios han demostrado que la bentonita reacciona con metales pesados para producir sustancias como Pb(NO3)2 y CdCO3. Esto puede hacer que la tasa de precipitación de los metales pesados alcance más de 85%. Este proceso no solo previene eficazmente que los metales pesados ingresen al cuerpo humano a través de la cadena alimentaria, sino que también reduce el daño de los metales pesados al ecosistema del suelo.
Bentonita modificada puede reparar mejor la contaminación por metales pesados en el suelo
Para mejorar aún más el rendimiento de adsorción de las bentonitas para iones de metales pesados, los científicos las han modificado. Los métodos de modificación incluyen tratamiento con ácido, modificación orgánica y activación térmica. El tratamiento con ácido aumenta la porosidad de la bentonita y su área superficial específica. La modificación orgánica inserta materia orgánica en la capa intermedia de bentonita, expandiendo el espaciamiento entre capas y mejorando su capacidad de adsorción de iones de metales pesados. La activación térmica cambia la estructura cristalina de las bentonitas mediante tostado a alta temperatura, lo que aumenta su capacidad de adsorción.

Por ejemplo, después de tratar la bentonita con ácido clorhídrico 0.5 mol/L durante dos horas, su área superficial específica puede aumentar de 60 m²/g a 120 m²/g. Este tratamiento también aumenta la adsorción de iones de plomo en más de tres veces. Tras la modificación orgánica con CTAB, la eficiencia de adsorción de la bentonita para cromo hexavalente aumentó de 40% a 85%. Estos métodos de modificación no solo mejoran el rendimiento de adsorción de la bentonita, sino que también amplían su rango de aplicación. Como resultado, se vuelve más efectiva para tratar diferentes tipos de suelos contaminados con metales pesados.
La estructura física y química única de la bentonita, junto con su fuerte capacidad de adsorción, ha demostrado un gran potencial en la protección ambiental. A través de su aplicación directa o modificación, la bentonita puede fijar eficazmente los iones de metales pesados en el suelo. Esto reduce su biodisponibilidad, protegiendo así la salud humana y el equilibrio del ecosistema.

